Educación Superior Técnica Profesional Inclusiva para el Empleo y/o Emprendimiento
Resumen
La
Educación Superior técnica profesional inclusiva, en Bolivia, se encuentra en
una disyuntiva y discusión si la educación que se imparte en los institutos
técnicos y tecnológicos está destinada para formar empleados que irán a cubrir
las necesidades laborales de las instituciones, empresas u otros que en la
mayoría de los países y las ciudades del mundo que son escasos y difíciles de
conseguir una fuente laboral que sea digno, permanente y bien renumerado o por
otro lado está la formación que orienta a crear un espíritu emprendedora donde
el estudiante tenga esas competencias y/o habilidades para que sea gestor de su
mismo empleo implementando emprendimientos que generen oportunidades económicas
y también de empleos para otros. Realizando un estudio y análisis de estos
criterios concluimos que los institutos técnicos y tecnológicos tengan que
implementar dentro de las mallas curriculares de cada carrera una educación
inclusiva en el área de conocimiento del emprendimiento porque coadyuvara de
manera importante al perfil profesional de un técnico con una formación
integral que sea capaz de generar sus
propios emprendimientos, como también lo manifiesta el modelo educativo en
Bolivia que es socio comunitario productivo.
Palabras
clave: Educación
inclusiva, emprendimiento, empleo digno, formación integral y educación
superior.
Abstract
Technical
professional Superior Education inclusive in Bolivia, is in an alternative and
discussion if education that imparts one in the technical and technological
institutes is destined to form employees who will be going to cover the labour
needs from the institutions, companies or others who in most of the countries
and the world cities are scarce and difficult to get a labour source that is
honorable, permanent and well renumerado or by other side the enterprising
education that orientates to create a spirit is where the student has those
competences and/ or abilities for which his same employment manager is
implementing emprendimientos that generate economic and also of employments
opportunities for other. Making a
study and analysis of these criteria we finish that the technical and technological
institutes have to implement in the curricular meshes of each race that area of
knowledge of the emprendimiento because that helped from important way to the
profile professional of a technician with a comprehensive education is Able to generate his own ones
emprendimientos, as also him the educative model in Bolivia shows that is
productive community partner.
Keywords: Education inclusive, emprendimiento, honorable
employment, comprehensive education and superior education
INTRODUCCIÓN
En la
mayoría de los estudios y experiencias diversas en América Latina y el mundo, dirigidas
a promover, desde diversos ámbitos, iniciativas de promoción hacia la educación
inclusiva y cultura emprendedora, se destaca la importancia nodal de la
educación inclusiva en el desarrollo productivo y el emprendimiento.
Asimismo,
estos estudios muestran, que lo que distingue a los países con mayor crecimiento
y desarrollo de aquellos rezagados, es, entre otros, sus políticas referidas a educación
inclusiva técnica y tecnológica y a la formación profesional. La educación técnica
inclusiva es fundamental debido a que representa el complemento del avance
tecnológico y por tanto es motor de crecimiento y desarrollo.
La
relación entre capacidades y tecnología contribuye a explicar las diferencias
de productividad e ingresos entre países, asimismo se constituye en una de las
mayores ventajas comparativas no móviles, que poseen los países en el acervo del
capital humano.
Por
otra parte, algunas de las ventajas generadas de las políticas de apertura de mercados
y educación integral inclusiva, y los beneficios del intercambio tecnológico se
incrementan cuando existen mejores niveles de formación del capital humano y
social.
En
relación a las oportunidades y a la equidad con inclusión, un mejor nivel
educativo abre la posibilidad no solo de mejorar el nivel de productividad de
los diferentes sectores económicos, al eliminar las desventajas provenientes de
las restricciones del conocimiento y la implementación de tecnologías de
vanguardia, sino y sobretodo instrumenta a las personas para que se muevan en
el mercado de trabajo y construyan su trayecto ocupacional con inclusión de
sexo o género.
El
problema central de la política de formación en la mayoría de los países de
América Latina, y sobre todo en Bolivia, es el bajo nivel de calificación de la
población que afecta las posibilidades de los países para impulsar sectores de
actividad con capacidad para dinamizar el tejido económico, equilibrar social y
regionalmente el proceso de desarrollo y darle sostenibilidad. Las políticas
activas de promoción de estos sectores encuentran en la educación básica de la
población y en la escasez de calificaciones específicas importantes limitantes.
En
este marco, entre los grandes desafíos que enfrentan las instituciones de
formación, como lo son los centros de educación técnica profesional de Fe y
Alegría, principalmente en el departamento de Potosí se encuentran la necesidad
de adecuarse a los requerimientos del entorno en el que trabajan y de asegurar
mecanismos de actualización permanente de sus ofertas formativas, respondiendo
a la dinámica socioeconómica del país y departamento que cambia día a día. La
realidad muestra que no existen puestos de trabajo permanentes y que los nuevos
espacios laborales con inclusión requieren personas emprendedoras y
polivalentes, que se adecuen a los constantes cambios en el mundo laboral.
Los
sistemas de formación tradicional ya no responden a las demandas del mundo productivo
ni a las personas que utilizan el servicio. Los acelerados cambios en la tecnología,
los nuevos perfiles requeridos por el mundo del trabajo, exigen el reconocimiento
de la correspondencia entre formación y productividad con inclusión. La
búsqueda de calidad de la formación técnica con inclusión y la incorporación de
enfoques innovadores en la gestión pedagógica son algunos de los rasgos comunes
de los cambios que se impulsan en Latinoamérica y el mundo para transformar los
viejos sistemas.
En
este contexto, la gestión de la formación técnica debe priorizar aquellos
sectores que requieren una formación focalizada que responda no sólo a las
necesidades del desarrollo nacional, sino también del desarrollo a nivel local
y a las necesidades de las personas con capacidades diferentes.
Una
política de formación y atención a estos grupos posibilitaría articular
políticas sectoriales (económicas) y políticas de desarrollo local
(territoriales).
Asimismo,
una política de educación inclusiva para el desarrollo debe posibilitar el
encuentro entre actores productivos y sociales para movilizar las
potencialidades de las regiones en beneficio del desarrollo local.
El
desafío debe considerar a las personas, especialmente a los jóvenes “porque son los más afectados por la falta de
inserción económica, debido al desempleo, y porque tienen la inserción más
precaria (54% de los jóvenes que están en el mercado de trabajo lo hacen en las
ocupaciones informales) y un acceso diferenciado a las oportunidades de
educación”.
Está
probado que los jóvenes sin escolaridad o con escolaridad incompleta se
concentran en los grupos de menores ingresos. Cuanto más bajo es su nivel de
escolaridad mayores son sus posibilidades de encontrarse desempleados, recibir
ingresos bajos o de estar amenazados de despido. Estos jóvenes normalmente
provenientes de familias de escasos recursos, suelen tener problemas de
inserción laboral o están ligados al subempleo por lo cual carecen de
protección laboral, o al trabajo familiar y no obtienen remuneración en esta
realidad la inclusión de estos jóvenes al mercado está en duda.
El
censo 2010 muestra que Bolivia está compuesta mayoritariamente por población
joven (entre 15 y 29 años), que supera el millón y medio (20% de la población
en general), y equilibrada entre hombres y mujeres, pero con una distribución
desigual: gran concentración de jóvenes en áreas urbanas y en su mayoría (75%)
en las ciudades del eje. Una proyección del CELADE estima que dentro de quince
años los jóvenes urbanos serán en Bolivia 2.160.000, excluidos de políticas de
trabajo digno.
En Potosí
y Bolivia, como en el resto del mundo, existe un predominio de lo urbano (63%)
sobre lo rural (37%). Este fenómeno de urbanización de la población joven se
debe a que la migración rural empieza a ser importante a partir de la
adolescencia, especialmente en las mujeres, que tienen en las ciudades la
oportunidad de encontrar ocupación.
RELACIÓN ENTRE LA
EDUCACIÓN INCLUSIVA Y LO LABORAL
En
Potosí y Bolivia las personas suelen incorporarse a la población económicamente
activa con precocidad debido a la organización del trabajo en las áreas
rurales. En las áreas urbanas la incorporación precoz es menor, pero en todo
caso creciente, debido a que la precariedad del ingreso de los jefes de familia
impulsa a los demás miembros de la familia a buscar estrategias de generación
de ingresos complementarios.
UDAPSO
(2001), ha estimado que la desocupación abierta de los adolescentes
comprendidos entre los 10 y 19 años es la siguiente: 10.8% en la región del
altiplano, correspondiendo 8.8% a los hombres y 13% a las mujeres; 6.5% en los
valles, con 6.2% para hombres y 6.8% para mujeres; y finalmente 6.9% en los
llanos, con 9.9% para hombres y 4.4% para mujeres.
Los
jóvenes son los principales catalizadores del desarrollo, son quienes aseguran
el recambio generacional y, por tanto, la renovación del capital humano y
social de la sociedad. De su desarrollo depende, fundamentalmente, el perfil
presente y futuro del país. Por ello, a fin de evitar la reproducción
intergeneracional de la pobreza es esencial promover políticas que faciliten el
acceso y disponibilidad de recursos para este grupo social.
Según
el diagnóstico de la situación de la juventud en Bolivia, existen 107.642 adolescentes
y jóvenes analfabetos (11% del analfabetismo existente en el país en la población
mayor de 6 años). Por otro lado, entre los 9 y los 11 años se produce el mayor nivel
de inasistencia escolar. En el área urbana la asistencia se reduce abruptamente
a los 14 años en proporciones cercanas en hombres y mujeres, lo que pareciera
mostrar que la deserción a estos niveles tiene que ver fundamentalmente con
razones de índole económica.
De
acuerdo a datos del Sistema de Información Educativa del Ministerio de
Educación, la tasa de abandono en las unidades educativas públicas fue de 10.1%
en 2010, 8.5% en 2011, 7.0% en 2013 y 6,36% en 2014, lo que da una tasa
promedio de 8.5% de abandono anual, alcanzando a 30% en el nivel primario e
inicial y a 40% en el nivel secundario. Esto significa que anualmente de los 2
millones de niños y jóvenes matriculados aproximadamente 170.000 abandonan el
sistema educativo. Actualmente estas cifras han ido mejorando a través de
políticas incentivos como el bono Juancito Pinto, que ha mejorado relativamente
cuyas cifras.
A
estos datos se agregan los del abandono escolar en el ámbito privado y la
situación de los jóvenes que nunca ingresaron al sistema educativo. En suma, se
puede concluir que cada año alrededor de 200.000 niños y jóvenes abandonan el
sistema educativo, por lo que es urgente el desarrollo de acciones desde el
Estado para darles atención y evitar que continúe y se profundice su situación
de pobreza y marginalidad.
LA EDUCACIÓN
TÉCNICA INCLUSIVA PARA EL EMPRENDIMIENTO.
Diversas
experiencias desarrolladas en América Latina muestran el carácter sistémico e integral
inclusivo del desarrollo emprendedor, el reconocimiento que tanto la educación,
como la cultura, los contextos sociales y económicos y otros factores, son
determinantes en los resultados del dinamismo de las experiencias emprendedoras
en todos los países.
Sin embargo,
es el capital humano y social un aspecto determinante para la creación de empresas
basadas en el conocimiento. Por lo tanto, el rol que cumple la educación
inclusiva en el desarrollo emprendedor, está ligado a la necesidad de
identificar factores claves, capacidades y competencias de empleabilidad,
ciudadanía y emprendimiento que las personas deben desarrollar para moverse en
un mundo laboral por demás complejo.
Los
resultados de diversos estudios sobre la problemática, muestran diferencias considerables
en el dinamismo de las empresas en América Latina, comparadas a las de las
otras regiones, debido a una serie de factores, entre los cuales el aporte del
sistema educativo al proceso emprendedor, se limita en la mayoría de las veces,
al desarrollo de conocimiento técnico específico en el área profesional u
ocupacional. Si a esto sumamos la baja calidad y pertinencia de gran parte de
la oferta formativa, reduciremos aún más el impacto que la formación está
teniendo en este ámbito.
Esta
consideración nos lleva afirmar que la formación tiene ante sí un gran desafío,
el de desarrollar en las personas capacidades, y competencias para formarse
como trabajadores/as independientes o dependientes, así como desarrollar
capacidades
Actitudinales
ligadas a las competencias necesarias para una ciudadanía responsable, que
privilegie el desarrollo de competencias claves como son la autonomía, la
iniciativa, la capacidad para tomar decisiones, el trabajo en equipo etc., en
una tarea articulada con el mundo laboral, convirtiendo a los ámbitos de la
educación inclusiva y el trabajo en dinamizadores del desarrollo de
emprendimientos. En síntesis, la formación profesional técnica y universitaria
tiene la responsabilidad de instrumentar a las personas para una inserción laboral
exitosa.
Las
nuevas condiciones económicas y los nuevos contextos globales han generado una nueva
cultura del trabajo, cuestionando el propio concepto trabajo. La inestabilidad,
la movilidad laboral el empleo a tiempo parcial y la entrada masiva de las
mujeres al mundo del trabajo configuran un complejo escenario donde el rol de
la formación es cada vez más importante.
La
crisis del Taylorismo y de sus principios básicos, tiene como una de sus bases
el reconocimiento del saber movilizado, como fuente de la competitividad y la
productividad.
Cada
vez más se reconoce el aporte del talento humano en el logro de los objetivos
de la organización en la que se trabaja, y donde se movilizan conocimientos,
actitudes y saberes en un proceso de suma continua, motor de la productividad,
la realización personal y colectiva.
Los
viejos paradigmas que reconocían a los trayectos formales como los únicos
espacios de desarrollo de conocimiento se han roto, hoy se reconoce a todos los
ámbitos de la vida como espacios educativos. “La tendencia es fusionar a la educación formal, no formal e informal
(ámbitos comunitarios, etc.) en una red de educación inclusiva permanente que
debe responder a las necesidades de capacitación de las personas a lo largo de
su vida productiva, a los cambios en el trabajo y a la internacionalización de
la cultura y la economía”.
A
partir de la gestión 2018, en los centros técnicos de profesionalización
superior de Fe y Alegría Potosí, con el apoyo del proyecto SAIH “Educación Técnica Superior Intercultural y
con igualdad de Género”, se esta fortaleciendo la educación técnica
inclusiva por toda la problemática planteada en los centros técnicos del nivel
superior, entendiendo en todo el sentido global del concepto inclusivo es
decir, desde la diversidad cultural de los estudiantes pasando por la equidad
de género en la ofertas formativas e incorporando a personas con capacidades
diferentes.
Por
lo tanto, se reconoce que las personas desarrollan conocimientos y capacidades continuamente
y que estas pueden ser reconocidas, potenciadas y certificadas. El movimiento
de las competencias laborales y la gestión de la calidad, se han convertido en los
últimos años en los enfoques más adecuados a las necesidades y demandas de educación
inclusiva. La formación profesional pensada desde el enfoque de competencias
permite desarrollar en las personas capacidades integrales que responden al
saber, (conocimiento) saber hacer, (destrezas habilidades, etc.) al saber ser,
(identidad, actitudes, etc.) y al saber emprender.
Una
oferta educativa pertinente, deberá incluir en su propuesta la formación para
la empleabilidad, entendiendo a ésta, como la capacidad para movilizarse en el
mundo del trabajo, o como la aptitud para “encontrar,
crear, (emprender) conservar, enriquecer un trabajo y pasar de uno a otro
obteniendo a cambio una satisfacción personal, económica, social y profesional”.
Es así que experiencias de desarrollo de estas capacidades y de la
transformación de los modelos educativos inclusivos por competencias han
aportado y están dejando valiosos aprendizajes.
En
este marco Fe y Alegría, está desarrollando una propuesta de estrategias y
políticas públicas, dirigidas a transformar el sistema educativo en el área técnica
inclusiva, donde la formación para la empleabilidad y el emprendimiento son
parte sustantiva.
Entre
los conceptos de base para la transformación podemos distinguir algunos que tienen
relación directa con el tema que nos ocupa: el desarrollo emprendedor:
En
primer lugar, el reconocimiento del rol fundamental que juegan los
emprendedores/as económicos y sociales en el desarrollo económico y social de
nuestro país y la valoración del talento humano como la materia prima de la era
del conocimiento.
En
este contexto, ¿qué tipo de formación profesional se requiere? O cuales son las
competencias que debe tener el perfil del emprendedor/a. ¿Como atender a las
necesidades diferenciadas de colectivos vulnerables?
Un
famoso emprendedor español, que se lo conoce como Pericles, afirma que: ser emprendedor supone ver los que los demás
no han visto, pensar lo que nadie más ha pensado y hacer lo que nadie más ha
hecho. La sociedad dice; requiere de emprendedores de distinto tipo, como
son los emprendedores empresarios, que son aquellos que impulsan negocios; los
intraemprendedores que son emprendedores por cuenta ajena; los emprendedores
sociales que son los/as que impulsan organizaciones, proyectos políticos, o de
desarrollo social, etc.
La
sociedad no solo necesita empresarios que aportan únicamente capital, sino
empresarios emprendedores comprometidos con la sociedad en la que viven, por lo
que éstos pueden actuar por vocación social, siendo competentes y productivos
para el logro de sus objetivos, como por ejemplo líderes sociales que lograron cambios
fundamentales en las condiciones de vida de diversos colectivos, o pueden ser emprendedores
que impulsan negocios y gestiones empresariales efectivas, aportando así al
desarrollo personal y colectivo.
De lo
que se trata en última instancia es de promover una sociedad inclusiva
emprendedora, dotada de personas emprendedoras y de estructuras sociales que
faciliten los emprendimientos. (Pericles Huelva 2004.)
La
educación debe pensar en un modelo de desarrollo de una cultura emprendedora, desde
la educación inclusiva primaria hasta la educación superior la consolidación de
la empresa construyendo una cadena de formación de emprendedores/as.
CONCLUSIONES
- Los actores de la Educación técnica tecnológica inclusiva, deben pensar en
articular un modelo de desarrollo de una cultura emprendedora, desde la
educación inclusiva primaria hasta la educación superior con la consolidación
de las empresas y/o microempresas construyendo una cadena de formación de
emprendedores.
- Será un avance significativo si se logra incluir en el currículo el área de
conocimiento del emprendimiento, en las
mallas curriculares de las 23 carreras técnicas que ha identificado y
autorizado el Ministerio de Educación de Bolivia a través de su Viceministerio
de Educación Superior y la Dirección General
de Educación Profesional Técnica, Tecnológica y artística.
- La formación integral inclusiva de los profesionales técnicos se constituye
en un valor agregado por lo que es importante inculcar la visión emprendedora
en los estudiantes para el logro de la inserción laboral en el área de su
formación, lo cual contribuirá a la mejora de la calidad de vida de los
estudiantes. Dado que es una realidad la falta de un empleo digno, en las
ciudades de Bolivia y Latinoamérica.
BIBLIOGRAFIA
-
ARROW, Keneth. Higher education
as a filter. Technological report. Universidad de Stanford. USA. (1972).
-
BECKER, Gary. Inversión
en capital humano e ingresos, en Luis de Tohaira (compilador) El mercado de
trabajo: teorías y aplicaciones. Alianza Universidad. España.
(1983).
-
BECKER, Gary. The Foundations of
Human Behavior. En The essence of Becher . Ed. Hoover Institution Press.
USA. (1995).
-
BRAUDEL,
Fernand. Civilización material, economía y capitalismo, siglos XV-XVIII.
Tomo II, Los juegos del intercambio. Ed. Alianza Editorial. España. (1979).
-
CLASP. (1998).
-
COTTON, Kathleen. Developing
Employability Skills. School Improvement Research Series. (SIRS) Close-
Up #15. (1993).
-
LLAMAS H. I. Educación
y Mercado de Trabajo en México. Ed. UAM-I. México. (1989).
-
PIERSON, F. An evaluation of
Wage Theory. En George W. Taylor et al “New concepts in wage
determination”. Ed. Mc. Graw Hill. EUA (1957).
-
PIORE, Michel. y DOERINGER, Peter. (1985). Mercados internos de trabajo y análisis
laboral. 2° edición. Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. España
-
SATERFIEL, Thomas H. - MCLARTY,
Joyce R. Assessing Employability Skills. ERIC Digest. Greensboro NC.
(1995).
-
Shultz, T. Investment in human
capital. American economic review, [Vol. 51 pp. 1-17]. USA. (1961).
-
SMITH, Jeremy, MCKNIGHT Abigail and
NAYLOR Robin “Graduate Employability: Policy and Performance in Higher
Education in the UK”. Economic Journal (junio). UK. (2000).
- STRAWN,
Julie. Beyond Job Search or Basic Education: Rethinking the Role of Skills
in Welfare Reform.
-
THUROW, L y LUCAS, R. The
American distribution of income: a structural problem. Washington. USA.
(1972).
- THUROW, L. El Futuro del Capitalismo. Ed. Javier
Vergara. Buenos Aires. (1996).
Wilbert Erquicia R. (2018)
Fe y Alegría Potosí.
Educación Superior Técnica Profesional Inclusiva para el Empleo y/o Emprendimiento
Reviewed by Género e Interculturalidad ITS´s Fe y Alegría
on
marzo 19, 2019
Rating:
No hay comentarios: